Ensayo: La enseñanza en Contextos críticos
Instituto
Universitario Puebla Extensión Morelia
MAESTRIA
“DESARROLLO DE
COMPETENCIAS DOCENTES”
Módulo:
Formulación y Evaluación de Proyectos Educativos
Documento académico
ENSAYO: La enseñanza en contextos críticos
Asesora:
Mtra. África Rebollar Corro
Maestrante:
Mtra. Claudia Ramírez Medina
Fecha:
25 de Enero del 2019.
INTRODUCCIÓN
Con
base en distintos documentos de consulta, con aportación de distintas visiones
del campo de la investigación educativa, la lectura y reflexión sobre sus
aportaciones en contrastación con mi visión y experiencia docente me permitió llevar a
cabo este ensayo académico de forma reflexiva, interactuando con los
pensamientos de otros protagonistas del campo educativo.
Las
reflexiones argumentadas sobre distintos puntos de vista enriquecieron mi
acervo sobre los contextos críticos que existen en nuestro país, tomando
consciencia de mi hacer docente, de los retos sociales que se tienen en nuestro
país y la importancia de contribuir a superar la crisis del sistema educativo.
Así
mismo me trasladaron a mi pasado, en mis primeros años de servicio laboral, en
zonas de difícil acceso, con niveles de pobreza relativa, desigualdad social,
analfabetismo, deserción escolar, lo
cual me llevo a la reflexión de lo que hice bien y de lo que me falto por
hacer, pero sobre todo revivir el reconocimiento social y agradecimiento que me
mostraba la comunidad por el simple
hecho de estar ahí, de haber mostrado sensibilidad ante su
situación, tratarlos con igualdad sin
formarme juicios por su aspecto físico, dialogar, escuchar sus opiniones y
respetar a lo que es más valioso para una familia sus hijos.
Para
terminar expreso mi conclusión con base en el análisis y reflexión sobre el
tema, desde mi perspectiva como docente que tuvo la oportunidad de conocer y
vivir en estos contextos críticos en varios años de servicio docente, por lo
que mis argumentos contienen el sentir de mi práctica ante esas experiencias.
Teniendo
presente que la educación del siglo XXI está afrontando, desde hace algún
tiempo, una serie de transformaciones tanto dentro como fuera del salón de
clase. Y a pesar de los diversos cambios; positivos como negativos, en el campo
educativo, es necesario entender las adecuaciones que debo llevar a cabo en el proceso de enseñanza-aprendizaje, para
crear una efectiva acción pedagógica, la cual responda a las necesidades de los
diversos contextos sociales que existen en nuestro país.
Al
reconocer la multiculturalidad que caracteriza a nuestro país, con lleva a
identificar que también existan diversidad de contextos sociales, los cuales
para este análisis académico se atenderán a los identificados como críticos;
por esta ubicados en zonas geográficas de difícil acceso, carenciados o también
llamados pobres o vulnerables; conceptos se irán abordando durante el desarrollo del
análisis, asociando estos contextos críticos con nuestro campo de estudio, la
educación la cual es valorada, como una “educación de calidad” en relación a la ubicación de su contexto vulnerable, pobre o crítico.
“La calidad de la educación debe residir en aspectos comunes
que relacionan a los componentes del sistema educativo. De la Orden y otros
autores (INEE, 2007) postulan que estos aspectos comunes son relaciones de
coherencia entre los elementos del contexto, recursos, procesos, productos,
objetivos educativos y necesidades sociales. La calidad de la educación es,
entonces, la cualidad resultante de las múltiples relaciones de coherencia
entre los componentes básicos, internos y externos, del sistema educativo con
objeto de alcanzar los objetivos y fines de la educación”[1].
Esta
relación que existe entre escuela y
contexto implica reflexionar sobre la
crisis que se considera existe en la actualidad en la escuela, como producto de
los componentes externos que se hacen presentes en ella.
A
pesar de que la Constitución en su Artículo 3º establece el derecho a recibir
educación básica obligatoria,
considerando a la educación como uno
de los medios importantes para la superación de los rezagos… para desarrollar y
potenciar las capacidades de las personas y así puedan éstas participar
activamente en el desarrollo social y económico del país.
“El
Sistema Educativo Nacional está
obligado a garantizar los servicios educativos públicos necesarios para que
todos los niños puedan acudir a las escuelas, sin importar la riqueza de sus
hogares, condición étnica u otra característica personal o de grupo social”[2].
Este derecho establecido en la ley y la
obligación del Estado como obligación
del Sistema Educativo Nacional no se
cumple cabalmente en la forma como debería de ofrecerla con la equidad e
igualdad, existen estudiantes que no reciben el apoyo para poderla recibir en sus contextos cercanos a su localidad,
bridándoles lo que se puede, a cuenta gotas y no lo que por derecho les
corresponde, y por lo tanto esto representa la presencia de la crisis que
existe actualmente en el proceso de enseñanza. Aprendizaje.
Al no haber relevancia de los contenidos, para
que estos sean útiles a los estudiantes para satisfacer las necesidades
sociales de su contexto, pertinencia a
sus necesidades particulares, así como eficacia externa. Al respecto El Sistema
Educativo Nacional expresa:
Si se puede llegar a considerar que se “tiene
eficacia externa, porque los resultados educativos concuerdan con la
satisfacción de necesidades sociales. Debe advertirse: puede darse el caso de
que el sistema educativo con los resultados reportados alcance eficacia
interna, pero se encuentre lejos de lograr eficacia externa; esto es,
resultados como el logro educativo correspondan con los objetivos educativos
planeados, pero no con las necesidades sociales”[3].
Por
lo anterior considero que independientemente de las condiciones vulnerables en
que se encuentre una escuela, es necesario reflexionar sobre los efectos de la
crisis educativa en el proceso de enseñanza- aprendizaje y sobre el papel
docente ante las circunstancias de riesgo y vulnerabilidad del contexto, con la intención de saber cómo intervenir con
mejores habilidades y estrategias en el proceso de enseñanza- aprendizaje, ante
los retos sociales que se me presenten en mi labor, reconociendo que en mi
función docente puedo generar la eficacia interna de la educación, la cual
puede trascender e impactar de manera positiva en el contexto
independientemente de su condición crítica.
Serra
y Calcino comparten dos ideas sobre los tipos de crisis que se pueden encontrar:
La
“crisis” es la situación que hoy vivimos como producto de las mutaciones de las
coordenadas que estructuraban la escuela, misma que no sabemos cómo entender y
abordar y la crisis en relación a la eficacia expresando… tal eficacia se
producía, al menos en cierta parte, en la situación de la escuela como un
espacio cerrado, donde parecían estar claramente establecidas las fronteras
entre el adentro y el afuera escolar[4].
Contrastando
estas aportaciones con la realidad laboral, coincido con ellas porque las
condiciones precarias que se perciben en diversas instituciones escolares
ubicadas tanto en zonas marginadas como rurales, la falta de maestros para las
comunidades más alejadas, la falta de fuentes de empleo para alcanzar el
bienestar social, los problemas sociales que afectan cada vez más a los jóvenes
en etapa escolar (alcoholismo, drogadicción,
alto índice de embarazos en niñas y adolescentes) y las condiciones
laborales del magisterio aunado a el nivel de compromiso profesional de los
docentes, entre múltiples aspectos, me hace reconocer que dicha situación es
cierta; la educación sufre una crisis.
Lo
anterior me invita a reflexionar que la escuela no puede estar cerrada a lo que
acontece fuera de su espacio escolar, porque aunque lo parezca, todo lo que
acontece fuera de ella no es externo, influye significativamente en el proceso
de enseñanza aprendizaje, nutre la práctica positivamente, le da el sentido del
para qué estudiar, para qué aprender, para qué enseñar, por lo que forma parte
de esta crisis del contexto económico y sociocultural y la educación tiene
responsabilidad de contribuir con la toma de conciencia de la comunidad
escolar, para afrontar la crisis con las mejores estrategias pedagógicas.
Serra y Canciano expresan: Hoy el afuera
penetró los muros de la escuela y comenzó a percibirse en el terreno educativo
con un mayor “peso” y mayor “influencia” sobre la función de la escuela en la
educación de los(as) niños(as) y los jóvenes[5].
Ciertamente
afronto que esta crisis no es de hoy, en mi opinión lo que ha afectado es que
no se ha hecho consciente en toda la comunidad magisterial; por comodidad e
inadecuado cumplimiento de la función docente en muchos casos, han transcurrido
años de consecuencias dañinas y malas costumbres, ha significado trabajar los
contenidos, sin una contextualización de la práctica educativa al entorno donde
se ubica la escuela, porque implica la obligación de actuar y asumir las
responsabilidades que esto conlleva, organizar la práctica con un sentido útil,
real, contextualizado.
Retomando
la aportación de la teoría del aprendizaje de Vigotsky la cual expresa: “el
contexto social influye en el aprendizaje más que las actitudes y las
creencias; tiene una profunda influencia en cómo se piensa y en lo que se
piensa. El contexto forma parte del proceso de desarrollo y, en tanto tal,
moldea los procesos cognitivos”[6].
La
escuela como un elemento dinámico, en interacción con la realidad social; donde
se encuentran personas con sus vivencias,
problemas, trabajos, diversiones, etc. Situada en una comunidad con
tradiciones, costumbres, lengua, fiestas, clima, flora, relieve, etc. Ya sea en lo individual o como comunidad,
todas estas personas poseen un conjunto de conocimientos de diferentes tipos
(saberes, destrezas, técnicas...) que la escuela muchas veces desconoce, no se
involucra o suele ignorar; en referencia a la muticulturalidad que se hizo
mención en un inicio de este análisis.
Por
lo tanto, ante la toma de conciencia de estas circunstancias que vivimos como
sociedad, me parece relevante retomar la idea de que la escuela pueda ser un
espacio donde se generen las condiciones de amparo y abrigo para los
estudiantes, ante situaciones vulnerables en contextos críticos como lo
manifiesta Serra y Canciano.
Por
lo que interioricé haciendo una introspección sobre los siguientes planteamientos:
¿en qué medida puede contribuir el papel docente y su intervención ante estos
escenarios vulnerables?, ¿ésta en la facultad docente abrir las puertas a esta
realidad del contexto, considerado externo a la escuela?, o ¿debe continuar
dejándolo fuera del salón porque no es su responsabilidad atenderlo?
Difíciles
cuestionamientos, pero no imposibles de llevar a la práctica, porque en la toma
de decisiones responsables del docente considero que tiene más beneficios que
prejuicios, permiten que la educación trascienda, sea funcional a la realidad.
El
maestro por medio de su labor puede ser el
puente para que las prácticas informales del contexto se formalicen y
brinden prosperidad a una comunidad, si emplea las estrategias para dialogar,
entenderse, tomar acuerdos y cooperar respetando sus creencias, tradiciones y
costumbres.
Delval
(2000) expresa "La escuela no puede llegar a cumplir su misión educativa
sin problematizar sobre el contexto social que la rodea, si bien ha de
armonizar esta sociedad y, desde ella, seguir trabajando activamente para la
mejora de la vida personal y comunitaria"[7].
Ante
las difíciles condiciones que enfrenta un contexto escolar, considero necesario
darle su lugar al conocimiento cultural que poseen las familias de estos
contextos, tomarlos en cuenta, involucrarlos, haciéndolos participes de la
gestión de la mejora de su entorno, tomando en cuenta sus opiniones,
invitándolos a participar en las
decisiones colectivas que afectan no solo a la escuela sino a toda la
localidad.
Como
promotor y gestor de progreso social, el
maestro debe brindar el ejemplo de la equidad e igualdad, evitando el
autoritarismo y los estereotipos de pobreza por
el aspecto físico o los supuestos “que no puede trabajar de mejor
manera” por la falta de recursos tecnológicos en la localidad.
Como
menciona Serra y Canciano: La posibilidad del desplazamiento de la tutela de
los(as) hijos(as) desde los padres a las escuelas parte del principio de que la
familia sola no puede ofrecerle al niño todo lo que éste necesita para su
educación. Aquello que la familia no puede ofrecer, sí puede hacerlo quien
posee saberes específicos: el docente[8].
Pero
esta confianza profesional que se deposita en el docente, implica una actitud
empática, la tienen que respaldar un conjunto de acciones responsables como
bien planeadas; interviniendo con sus prácticas pedagógicas para
aprovechar los recursos que le ofrece la naturaleza, superando las
limitantes del contexto, alejándose de pensamientos negativos donde solo se
percibe la pobreza material en lugar de enfocarse en la riqueza natural y
cultural que tienen los contextos más críticos y vulnerables.
Cecilia
Cardemil y Sonia Lavín en su libro “Juntos logramos más” expresa al respecto:
“La escuela ésta obligada a asumir las
transformaciones socioculturales que se instalan en la población, en modos de vivir y proyectar
la vida de niños y jóvenes envueltos, de manera creciente, en una cultura donde
prima el individualismo, la violencia, las drogas, el exitismo económico y las
dificultades que esto implica para insertarse satisfactoriamente en la sociedad”[9]
Por
tal razón apoyo la importancia de tratar a las familias con sensibilidad y respeto
en estos contextos críticos, evitando el rechazo, la exclusión y la marginación
de las personas en condiciones vulnerables. Desde mi opinión este es el punto
clave del encuentro con los integrantes de una comunidad, facilita la
colaboración en la tarea común de educar y tener iniciativas por proyectos
sociales que impactan desde la escuela a toda una comunidad.
Confío
en que estas acciones sensibles responden
a las interrogantes que formula Serra y Canciano; cómo ofrecer
condiciones de enseñanza que contribuyan a disminuir los elevados índices de
deserción y cómo ofrecer una educación enriquecida simbólicamente para todos.
Por
lo contrario no estoy de acuerdo con el criterio de mismidad que se menciona; que significa que lo que se
plantea es que los(as) niños(as) que viven en condiciones de pobreza siempre
son “otros”: es el “otro” el que no se comporta como “nosotros”, el que vive
otra vida, el que tiene otros códigos y requiere de estrategias especiales[10].
Ésta
claro que si nos ubicamos en este trágico panorama de exclusión del sistema
educativo, los estudiantes en contextos vulnerables quedan minimizados en
cuanto sus deseos e interés por aprender, se
legitiman su estratificación social. Se les abandona y se cae en las
suposiciones que no tienen posibilidades de aprender, situación que considero
completamente dañina si el docente se presenta con esta forma de pensar y
actuar, mostrando expectativas bajas del
logro del aprendizaje de sus
estudiantes.
Creo
firmemente que no es lo mismo, contextualizar la práctica educativa a las
necesidades del entorno, que ofrecer un trabajo cerrado al aula,
improvisado, fácil, rutinario como
aburrido sin retos cognitivos al gusto y parecer del profesor, por lo que no
hay que confundir el uso de actividades de entretenimiento, mecánicas y
agotantes, con el diseño y selección de estrategias desafiantes, por medio de
las cuales se aprovecha los recursos del entorno, se impacta en la vida de
estos estudiantes, se les trate con
respeto a la diversidad de su cultura
y se reconoce el amplio conocimientos que poseen sobre la
naturaleza de su entorno.
Flaviane
opina, independientemente de los contextos vulnerables la organización como
instancia formadora, no debe perder su sentido para el cual fue creada y el rol
del maestro no debe perder su sentido original[11].
Apoyo
esta idea si se atiende una interacción emocional virtuosa, maestro- alumno, se tiene expectativas positivas de los
estudiantes, se escucha la voz de las familias del contexto, estas acciones son
transformadoras porque por medio de ellas la relación con la organización
educativa puede recuperar su centro y promover interacciones protectoras para
los estudiantes. Donde la experiencia de satisfacción generada por el maestro,
permita volver al centro los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Para ello, se debe desarrollar la capacidad de
diferenciarse la educación de la escuela de la cultura de la calle a través de
comportamientos, lenguaje y códigos de
comunicación que delineen
una cultura en la que todo acto
tiene intencionalidad educativa.
Ante
ello considero necesario abordar el
significado de pobreza para
reconocer como puede afrontarse y distinguirse, sin pretextos que
supongan que el contexto critico bloquea las capacidades del maestro para
intervenir situadamente con sus estrategias y habilidades para motivar el
proceso de enseñanza- aprendizaje de forma eficaz, brindando el máximo esfuerzo
profesional y sensibilidad humana.
Para
el coneval (2010) la pobreza multidimensional implica que una persona se
encuentra en situación de pobreza multidimensional cuando no tiene garantizado
el ejercicio de al menos uno de sus derechos para el desarrollo social, y si
sus ingresos son insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere
para satisfacer sus necesidades.[12]
El
Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) da
a conocer el último dato oficial sobre pobreza en el país que corresponde a
2014, que se calculó tomando en cuenta el ingreso de los mexicanos, pero
también su acceso o carencia a los siguientes derechos sociales: derecho a la
educación, derecho a servicios de salud, seguridad social, acceso a la
alimentación, la calidad y espacios a la vivienda como pisos firmes, material
de techos y muros.
Con
la información anterior se puede reconocer que ser pobre en México no sólo
depende del ingreso, por lo que se puede ser pobre en distintos niveles, pero
lo relevante de esta información, en mí actuar docente es no permitir la
pobreza espiritual del estudiante, la desconfianza de no lograr obtener el bienestar personal que viva sin
expectativas de construir un futuro mejor para él y su entorno familiar por
medio de la educación, es preciso
fomentar la confianza en sí mismo y en la valoración de su contexto
sociocultural; que con todas sus limitantes le brindan una identidad en el
mundo donde ésta situado aquí y ahora, por lo que tiene el derecho de recibir
una educación digna y humana, superando la vulnerabilidad en que se encuentra
por medio de una intervención docente responsable, profesional y comprometida y
una organización educativa responsable de la función que debe cumplir.
CONCLUSIÓN
Estoy
consciente que la labor educativa no es fácil y en contextos críticos o con
mayor vulnerabilidad de pobreza y desigualdad social, es más desafiante lograr
el proceso de enseñanza- aprendizaje, sin embargo estas dificultades no deben
obstaculizar la intervención docente creativa y responsable, es necesario tener
presente la satisfacción que produce orientar el aprendizaje en estos contextos
no solo para el estudiante sino también para la familia y el docente.
Los
rostro de agradecimiento sincero, la alegría y entusiasmo de los estudiante
cuando el aprender les causa bienestar emocional, les abre puertas a otras
oportunidades de vida mejor, les permite superar situaciones difíciles y tomar
mejores decisiones personales,
construyendo su proceso de desarrollo bajo la protección y abrigo de una
escuela, representa uno de los logros
más significativos de la función docente.
La
eficacia de la intervención docente considero que está, en saber aprovechar lo
que el contexto independientemente de su condición, ofrece para construir experiencias
significativas para los estudiantes, evitando lamentaciones por lo que no se
tiene y concentrando toda la energía en lo que se tiene y puede potenciar en el proceso de
enseñanza- aprendizaje.
La
crisis de la educación puede afrontarse, sí el docente está dispuesto a
trabajar colaborativamente con la comunidad, escuchar las voces de las familias
que enfrentan estos contextos, ser un buen promotor de proyectos que impacten y
transformen el contexto, así como por prepararse continuamente y trabajar en
academias docentes proactivas, pero ante todo muestra apertura para
contextualizar los conocimientos, abriendo las puertas del aula al entorno que
le rodea mirando con igualdad, equidad y
respeto a estas comunidades sociales, que requieren ser tomadas en cuenta y
necesitan del impulso de la educación para afrontar las desigualdades sociales,
la marginación y la exclusión.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
·
Cardemil,
Cecilia y Lavín Sonia. 2012. Juntos
Logramos más. Tejiendo encuentros entre familias y maestros. México. D.F.
Edit. SM. Pág. 19
REFERENCIAS DIGITALES:
·
Flabiane,
Flavia y Yañez, Nadiezhda. 2008. Rol Docente en Contextos Vulnerables.
Construcción de Subjetividad. Profesión Docente. Docencia No. 35. Fecha:
23/01/2009. Recuperado desde: https://docplayer.es/12826329-Rol-docente-en-contextos-vulnerables-construccion-de-subjetividad-flavia-fiabane-salas-1-nadiezhda-yanez-oyarzun-2.html
·
Martínez, Joram. (2008). Revista de
innovación pedagógica y curricular. La teoría del aprendizaje y desarrollo de
Vigotsky. 2Consultada 24/01/2009. Retomada de https://innovemos.wordpress.com/2008/03/03/la-teoria-del-aprendizaje-y-desarrollo-de-vygotsky/
·
Ortiz Galindo, Jonathan, Ríos Bolívar,
Humberto. La Pobreza en México, un análisis con enfoque multidimensional.
Análisis Económico [en línea] 2013, XXVIII (Septiembre-Diciembre) [Fecha de
consulta: 23 de enero de 2019]
Disponible en:<http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=41331033010>
ISSN 0185-3937
·
Robles,
Hector. 2010. El sistema de indicadores del Instituto Nacional para la Evaluación
de la Educación de México. Sinéctica. Fecha: 25/01/2019. Retomado: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-109X2010000200003#notas
·
Serra, M. S. y Canciano, E. (2006) La s condiciones de
enseñanza en contextos críticos. (1ª ed.) Consultado 23/01/2009 Retomado de: file:///C:/Users/CLAUS/Documents/EVIDENCIAS%201SEM/modulo%20Afri/La%20enseñanza%20en%20contextos%20críticos[8064].pdf
·
Temas para la educación. (2009) Revista digital para
profesionales de la enseñanza. No. 5. La importancia del contexto en el proceso
de enseñanza aprendizaje. Fecha: 24/01/2009. Retomada de: https://www.feandalucia.ccoo.es/docu/p5sd6448.pdf
[1] Robles, Hector. 2010. El sistema de
indicadores del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación de
México. Sinéctica. Fecha: 25/01/2019. Retomado: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-109X2010000200003#notas
[2]
Ibídem. Fecha: 25/01/2019. Retomado: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-109X2010000200003#notas
[3]
Ibídem. Fecha: 25/01/2019. Retomado: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-109X2010000200003#notas
[4]
Serra, M. S. y Canciano, E.
(2006) La s condiciones de enseñanza en contextos críticos. (1ª ed.)
Consultado 23/01/2009 Retomado de: file:///C:/Users/CLAUS/Documents/EVIDENCIAS%201SEM/modulo%20Afri/La%20enseñanza%20en%20contextos%20críticos[8064].pdf
[5] IBIDEM. . Consultado 23/01/2009 Retomado de: file:///C:/Users/CLAUS/Documents/EVIDENCIAS%201SEM/modulo%20Afri/La%20enseñanza%20en%20contextos%20críticos[8064].pdf
[6]
Martínez, Joram. (2008). Revista
de innovación pedagógica y curricular. La teoría del aprendizaje y desarrollo
de Vigotsky. 2Consultada 24/01/2009. Retomada de https://innovemos.wordpress.com/2008/03/03/la-teoria-del-aprendizaje-y-desarrollo-de-vygotsky/
[7] Temas para la educación. (2009)
Revista digital para profesionales de la enseñanza. No. 5. La importancia del
contexto en el proceso de enseñanza aprendizaje. Fecha: 24/01/2009. Retomada
de: https://www.feandalucia.ccoo.es/docu/p5sd6448.pdf
[8] Op. Cít. Serra y Canciano. Consulta 24/01/2009. Retomado de: file:///C:/Users/CLAUS/Documents/EVIDENCIAS%201SEM/modulo%20Afri/La%20enseñanza%20en%20contextos%20críticos[8064].pdf
[9] Cardemil, Cecilia y Lavín Sonia.
2012. Juntos Logramos más. Tejiendo
encuentros entre familias y maestros. México. D.F. Edit. SM. Pág. 19
[10]
Op. Cít. Serra y Canciano. Consulta 24/01/2009. Retomado de: file:///C:/Users/CLAUS/Documents/EVIDENCIAS%201SEM/modulo%20Afri/La%20enseñanza%20en%20contextos%20críticos[8064].pdf
[11]
Flabiane, Flavia y Yañez,
Nadiezhda. 2008. Rol Docente en Contextos Vulnerables. Construcción de
Subjetividad. Profesión Docente. Docencia No. 35. Fecha: 23/01/2009. Recuperado desde: https://docplayer.es/12826329-Rol-docente-en-contextos-vulnerables-construccion-de-subjetividad-flavia-fiabane-salas-1-nadiezhda-yanez-oyarzun-2.html
[12]
Ortiz
Galindo, Jonathan, Ríos Bolívar, Humberto. La Pobreza en México, un análisis
con enfoque multidimensional. Análisis Económico [en línea] 2013, XXVIII
(Septiembre-Diciembre) : [Fecha de consulta: 23 de enero de 2019] Disponible
en:<http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=41331033010> ISSN 0185-3937
Comentarios
Publicar un comentario